SOBRE BLOGS Y BLOGUEROS (1er. Aniversario).

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Son muchos los blogs, que hicieron su aparición inicial, aproximadamente, en estas mismas fechas. Curiosamente, este es el caso de "la Hoja", que al final de este mes, hace un añito que se empezó a parir.
La trayectoria ha sido gozosa y ascendente, de menos a más, cosechando un porrón de buenos amigos y amigas, que me han dignado con su presencia y sus agudos e inteligentes comentarios, enriqueciendo este espacio, que también es el de todos ellos.
A pesar de que para nuestra España ha sido un año para olvidar (y lo que te rondaré morena), para este blog, ha sido un tiempo de satisfacciones y de esperanza. Una esperanza, que conforta y consuela, basada en toda esa buena gente, que demuestra con su esfuerzo diario, que no está todo perdido.

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Cuando puse en marcha, aquel blog precursor, que algunos recordareis, me propuse dos objetivos básicos. Por un lado, defender todos aquellos principios necesarios que hoy están siendo brutalmente atacados por el desgobierno más inconsciente y fanático que España ha tenido que soportar estos últimos años; y por otro aportar mi granito de arena en base a mis creencias, mi ya larga experiencia vital (muy a mi pesar) y mis conocimientos adquiridos a lo largo de esos años (más sabe el diablo por viejo, que por diablo).
Aquella primera aventura terminó, sin embargo en esta segunda bitácora, sigo recogiendo mucho de la esencia de aquel lobo combativo.
Ahora bien, aunque reconozco, porque además yo lo he querido así, que "La hoja" es mucho más variada, porque además de la dichosa política, tocamos todo tipo de temas: cine, arte, literatura, religión y actualidad; sin embargo, no me he querido escaquear, ni un ápice de la misión principal, recogida en la "declaración de principios" en el lateral de mi blog. Lo contrario hubiera sido deserción y eso es algo que no contemplo.

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Es evidente, que cuando uno salta a la arena virtual, no tiene porque gustar a todo bicho viviente. Nunca llueve a gusto de todos, y uno no es moneda de Monopoly que a todos satisface. Además esas desavenencias con algunos, y más, si son airadas o inconvenientes, de alguna manera, significan que se están haciendo bien las cosas.
A unos les gustará más el fondo que la forma y viceversa; habrá quien nos acuse de excesiva politización, otros de demasiada religión; algunos dirán que tu estilo es directo, otros que demasiado enfático... es lógico, para gustos están los colores. La declaración de principios está hecha y expuesta y a ella me remito, y trato de llevarla a cabo con la máxima seriedad, el rigor requerido y toda la honradez y sinceridad que sea capaz de dar.

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El lector que entre aquí de buena fé, con educación y respeto siempre encontrará estas puertas abiertas de par en par, para permanecer, y si es de su agrado, opinar sobre lo que quiera. Sin embargo, el que entre de malas pulgas y para poner la casa boca arriba, con insultos, descalificaciones o inexactitudes manifiestas, no encontrará eco a sus paranoias; porque como dijo alguien, un blog es la casa de uno, y en cada casa hay unas normas y existe el derecho de admisión.
Personalmente, he de decir, que aunque no me gustán los comentarios "anónimos", (prefiero a los que dan la cara, al menos desde un alias y con alguna localización posible); aún así, estos también serán publicados, como se ha venido haciendo, si respetan esas normas de convivencia y educación básicas.
Precisamente, y me hace mucha gracia, hay quienes se escudan en nuestros alias para acusarnos de cobardía. Ante esto, he de responder que el esconder la identidad, ante tanta persecución y ante tanto posible desconocido, responde sobre todo a la cautela debida, sobre todo a los que tenemos más cercanos, no a nuestro propio interés; nunca al escamoteo de nuestras acciones (tiro la piedra y escondo la mano), sino a un ejercicio máximo de sensatez y prudencia, que son virtudes inmejorables. ¡Que flaca tienen la memoria algunos o que poco han leido!. Todavía son dignas de mención los miles de lectores del diario ABC, o miembros de Acción Católica, que hoy duermen el sueño de los justos en Paracuellos o en otras tantas fosas comunes de nuestra geografia española; aquellos pobres, solo tuvieron juicio sumarísimo, sin defensa y a morir a manos de turbas de milicianos, solo por estar en la lista de suscriptores de tal diario o ser miembros significados de cual asociación.
Desgraciadamente, a los que están en el poder, ya les conocemos, y si quieren saber mi nombre, posiblemente lo tengan fácil, pero yo no se lo pondré en bandeja.

Bueno, lo dicho, que me he enrollado mucho; que cumplimos un añito, y vamos a por el segundo, con todas las ganas del mundo y con toda la carne puesta en el asador. Resistiremos, hasta que el cuerpo aguante; aunando en una frase a dos grandes, Lope de Vega y Muñoz Seca, me atreveré a decir que, estos nos podrán arrebatar el reloj, nos quitarán la cartera, las llaves y hasta la vida; pero hay una cosa que no nos van a poder quitar nunca: el honor, porque este, es patrimonio del alma y el alma solo es de Dios, a quien queremos y nos debemos.

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Pdta. Id pasando por vuestra ración de tartita, pero daos prisa no sea que los ratones ferrazinos se lleven todo y nos dejen solo las migajas.

Entretanto, os dejo con un el consabido "happytote" cantado por los mejores, y un buen consejo osuno (¡toda una afirmación sobre la bondad de la Providencia!), que me aplicaré yo mismo, en esta nueva etapa....

Happy Birthday - The Beatles

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