BraveHeart.
Gladiator - 'Now We Are Free' .
Kingdom of heaven.
300
La última, como siempre la reservo, no solo por ser, a mi parecer la mejor de las músicas, sino que además va con segundas para alguien que me identifica, muy inmerecidamente, con el epíteto de Lohengrin. Ni que decir tiene que es un honor, que agradezco profundamente y que solo acepto por el cariño y por el respeto que tengo por la persona que me nombra con tan importante y legendario apelativo.
La escena, es de la película "Excalibur" de John Boorman, en ella, este afamado director hace su muy particular interpretación de la leyenda artúrica. El fragmento que aparece en el vídeo es del final del film, la muerte de Arturo y la posterior vuelta de la espada Excalibur a la dama del lago. En ella, Boorman elige como fondo la inigualable música de Wagner, de El crepúsculo de los dioses.
Esta obra wagneriana, es la última de las cuatro óperas que componen el ciclo El anillo del nibelungo, concretamente la que se recoge en esta parte de la película, es la impresionate "muerte de Sigfrido", de gran poder dramático y épico. Boorman así, auna en una misma obra artística dos de los más grandes heroes épicos de la litertatura mundial.
Acabo el post, con una de las últimas frases de "Excalibur", algún día el Rey volverá, resumiendo en ese deseo, la esperanza del fin de los tiempos de oscuridad y el regreso al Reino de la cordura, la luz y la paz. Que así sea.
Como propina final, recojo también, un vídeo con la obra original de Richard Wagner, teatralizada en su verdadero y espectacular contexto.
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2 comentarios:
Gracias por compartirlo.
Un saludo como siempre
Ya te he dicho lo que me han gustado estos dos últimos videos, pero quiero decírtelo una vez más muchas gracias por tu dedicatoria.
Son magníficos y te transmiten esa fuerza de saber que hay algo por lo que merece la pena vivir y morir, que no todo es igual, ni todo da lo mismo. No es sólo una película ni una opera, ni un espectáculo, es la confirmación de lo que uno cree y nadie te puede arrebatar por difícil que sea vivirlo hasta las últimas consecuencias.
Gracias me ha elevado el ánimo, creeme. Es un gran regalo.
Ahora tengo que confesarte que estos días he estado leyendo despacio el argumento de Lohengrin y estoy por quitarte ese nombre porque al final me parece una desfachatez que él se vaya como ha venido, montadito en su cisne blanco y ahí te quedas...
Tendré que buscar otro.
Y otra cosa, el video de Escuela de Sirenas me encantó, pero no te digo cual era yo porque me da verguenza que a estas alturas descubras mis antiguas aficciones. De todas formas gracias por encontrarlo. Ya verás como me ponga yo a buscar videos de tu vida pasada.
Un beso Lohengrin, de momento
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