miércoles, 11 de mayo de 2011

UN FELIZ y ESPERANZADOR CUADRO


Aquí estoy de nuevo. Ciertamente ha sido un fin de semana intenso, de esos que dejan huella, de los que cambian, de los que empujan, de los que alientan.
Han sido muchas las emociones, tantas que cuesta un poquito bajar de la nube y recomponer la rutina.

Sin embargo, la causa de mi prolongado y poco habitual silencio bloguero, no es otra que un “catarrazo” morrocotudo, pescado en el chaparrón mañanero del sábado.
Ese día, cayó en Madrid, lo que no está escrito…, y sin embargo, allí estaba yo ejerciendo las arduas labores de “pater amantísimo”, sufriendo los mágicos pases de balón de mi hijo y las inclemencias del tiempo.
Así pues, la culpa de mi trancazo y de mis ausencias, la tienen sin duda, esos inflexibles árbitros de la federación madrileña de fútbol, que por respetar absurdamente el calendario, no tuvieron piedad de los chavales (ni de los papis) ante la descomunal cortina de agua que, en ciertos momentos caía en aquel campo convertido en un estanque: ¡Villarato!, ¡Villarato!.... jajaja.
Menos mal, que Dios es justo y bueno, y en este caso, fue el padre el que cogió el resfriado y el hijo se libró.
Dicho esto, a modo de disculpa justificada, y todavía entre Kleenex y Kleenex, no puedo dejar de comentar todo lo ocurrido, en este BENDITO y memorable weekend, un poquito antes de que ese incipiente virus aflorara con fuerza.

Como todos los que pasáis por aquí sabréis, este pasado fin de semana, ha tenido lugar una alegre confluencia.
Sevilla, Tomelloso, Majadahonda, Zaragoza, Alcorcón, Sabadell y Madrid, de alguna manera, estos días, se han sentido hermanadas, unidas en mágica conjunción, gracias a un cordobés singular: ¡Ángelo! (desde ahora “el bloguero viajero”).
Ángel, ha venido, otra vez a Madrid. Y de nuevo, tal y como lo hace desde su blog (Ver enlace), él, ha sido el magnético reclamo, para que muchos acudamos atraídos a su encuentro, incluso desde puntos muy separados.
Ángel venía con la agenda llena y se ha marchado, habiéndonos dejado un pleno en el corazón. Nos sentimos agradecidos por su esfuerzo. A mí, me entusiasma verle como un apóstol de los de antes, de los primeros; como San Pedro y San Pablo cuando se desplazaban a evangelizar y recorrían medio mundo, para compartir la Palabra y el Pan con sus hermanos en la fé.
Ángel ha dado el empujón, y los demás nos hemos subido gustosamente a ese carro sin posibilidad de decepción, pero el primer mérito es el suyo y eso… hay que reconocerlo; por eso, tiene toda nuestra admiración y nuestro cariño.

Mirando con la perspectiva del tiempo, todo ese prodigioso cuadro que Dios ha querido dibujar para y con nosotros, en este encuentro esperado, uno empieza descubrir, a sentir, su amorosa mano. Él, sabe poner luz en nuestras sombras, color en nuestras vidas.
Todo lo vivido este fin de semana ha sido bueno.
Particularmente he tenido la oportunidad de estrechar lazos, de conocer, de abrazar a los que quiero, de sentir bondad, de ser feliz. Luego habrá que seguir, hay mucho que meditar, hay mucho que andar, la lucha continúa y la oración no debe cesar; pero lo que antes se intuía, ahora se confirma, ¡no estamos solos! Estamos juntos y Dios está con nosotros.
Lo vi en vuestras miradas, en las palabras, en los gestos de cariño. Cuando estuvimos juntos, el tiempo se nos hizo corto. Algunos, nunca nos habíamos visto y fue como si nos hubiésemos conocido desde siempre. Estábamos a gusto.
De alguna forma, este fin de semana he sentido muy palpablemente la comunión de los santos, he visto en todos vosotros, una parte del cuerpo místico de Cristo, que es la Iglesia.
No es extraño pues, que todavía esté exultante; repito, ¡he sido feliz! No es palabrería barata es una realidad que rebosa. Bastaría ver cualquier imagen que captó con maestría la cámara del gran Elías para comprobar lo que digo; mi felicidad no se puede fingir, por tanto, mi agradecimiento es inmediato y también lo son, los ruegos para que mis hermanos continúen la labor emprendida.
Nadie es prescindible y todos somos necesarios; incluso aquel o aquella que piense que su aportación es poca, su magistral lección de humildad, ya es tremendamente valida.
¡Hay que seguir! Compartir es avanzar, y más en la situación en la que estamos sumidos, que se refleja en una realidad estática, descolorida…, plana.
Hemos de dimensionar al mundo en Cristo. La visión sobrenatural que producís en vuestros blogs y en vuestros comentarios es la luz y la esperanza que el mundo necesita, por eso es absolutamente necesario, por amor, continuar.

Los blogueros no somos distintos de los demás, ¡cuántas veces hemos visto nuestras flaquezas!, tantas que a veces, nos es muy difícil encontrar excusas a nuestros pecados.
A veces,-hablo por mí-, sabemos bien que nos sonrojaríamos, como el sol que se pone, si los demás se hubieran asomado al fondo de nuestra conciencia en algunos momentos de nuestra vida, ¡Que injustas nos parecen, entonces, esas ponderaciones, que con demasiada generosidad nos hacen los demás!
Pero, también sabemos, hemos tenido la inmensa suerte, la gracia no merecida, de saber quienes somos, y saber exactamente lo que valemos. Cristo mismo nos ha comprado a precio de su Sangre, y esa preciosa realidad es la que, con frecuencia, me recordáis vosotros, mis queridos hermanos del espíritu y del alma, en vosotros me apoyo y me refugio.

Por eso, en este momento, quiero estrechar en un primer abrazo fraternal, a los blogueros y comentaristas con los que estuve el sábado, uno a uno:
A Angelo de “Siete en familia”, Elías de “Por la vida… and family, Isabel (Camino Garcia), Francisco (Mercuzzio), Ana (Una madre agradecida), Rosario de “Soliloquios de la gran visigoda” (como me gustó conocerte y que bien me haces) y Tonymix de “Heroemanía” and family.

También deseo abrazar, a quienes también estuvieron con este “Ángel viajero” en esta ocasión y no tuve la oportunidad de conocer: a Patricia de “Fiat Mihi”, a Fran de “Luz apacible” y a D. Alfonso García Nuño de “Glosas marginales

Y así mismo, quiero decir que echamos de menos, a muchos. La invitación estaba hecha desde la bitácora de Ángel, para todos. A los que no pudisteis venir, os hemos tenido en el corazón. Por mi parte, hago un recuerdo especial para Julio de “Soy Capaz”, Militos de “De dentro” y a mi querido Bruce.
Estoy seguro, que en otros encuentros habrá más oportunidades de conoceros y de concurrir con algunos más, pero sabed que, de palabra y oración, también vosotros estuvisteis muy presentes en este fin de semana tan bonito y especial.

Por fin, ahora finalmente lo reconozco.
No solo ha sido el catarro el que me ha tenido apartado de la blogosfera. Ha sido sobretodo…, esta especie de resaca espiritual, que no he sabido colocar hasta ahora.
Una alegría embriagadora nacida en el fondo del alma. Esa sonrisa interior que aún mantengo, me delata y me sumerge en una indecible felicidad, al recordar este sábado.
Me acuerdo bien de todos vosotros, de esas luces que sois, y os amo por haber iluminado, el camino al ideal a donde aspiro llegar. Gracias a todos por darme luz y por dejarme andar a vuestro lado.
Por vosotros, se recobra la esperanza. Estamos juntos, ¡se avecinan buenos tiempos...!
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*    *    *    *    *

16 comentarios:

alter-ego dijo...

Arcen,espero algún día en conocerte y al resto de compañeros blogger.Saludos y Dios te guarde.

Angelo dijo...

Imposible no emocionarse ante un post tan hermoso como el que has realizado. No tengo palabras. Tenía escrita mi crónica para publicar y la he rechazado. Tú has sabido plasmar muy bien las mismas emociones que se apoderaron de mí. Siempre se recibe mucho más de lo que se da.¡Bendito sea Dios!
Un abrazo y gracias por tu magnífica organización para que el encuentro fuese inolvidable.
¡A por Roma!

MDR dijo...

Que alegría que compartas el gozo que vivieron.
Y que estes mejor de salud.
Bendiciones amigo!!

Anónimo dijo...

Doy gracias a Dios que me llevo hasta vosotros. Fue un placer conocerte a ti y a todos los demás, tampoco yo puedo borrar la sonrisa que este encuentro ha dibujado en mi rostro.
Un abrazo inmenso desde lo más hondo.

Y resucitar contigo dijo...

Yo también tengo ganas de abrazarte, así como a los que el Señor me concedió hacer el domingo.

Es algo impresionante, ¿verdad? Parece una locura, gente diferente, que se encuentran con Él en medio y queda una inmensa alegría que todavía dura y no se sabe explicar bien.

Tenía ganas de conocerte, shhh, ahora que no nos lee nadie, les pregunté cómo eras, pero ya te he podido ver en el hermoso video.

GRACIAS al Señor por vosotros.

Ya esperaba esta crónica.

Que te mejores!!!

Un abrazo

Ramón en http://nocheoscuradelalma.wordpress.com/ dijo...

Bienvenido otra vez, yo también con un catarro bestial. Que Dios te proteja

Terly (Juan José Romero Montesino-Espartero) dijo...

Amigo Arcendo:
Por tu magnífico post veo que junto a Angelo y algunos otros amigos, habéis pasado un maravilloso fin de semana de amistad y sobre todo de comunión espiritual. Me uno a ese abrazo bloguero y te ruego que cuando estéis unidos para estos menesteres, penséis un poco en mí dejando alguna oración en el alero del tejado del Señor.
Un abrazo.

LAH dijo...

Ahhhhh! ahora me explico por qué Angelo se ha decantado por no escribir sobre esto...
Pues tambien desde aqui lo animo, porque aunque es perfecta tu entrada, siempre habrá mas cosas...no? os leo con verdadera alegria, a ti a Visigoda, lo que me conto Patricia por mail...y ya no me quiero repetir mas pero espero otra proxima ocasión donde espero que el Señor me regale el poder abrazaros a cada uno de vosotros!
un abrazo Arcendo!

Militos dijo...

¡Ya era hora! he llegado a pensar que te habían secuestrado los blogueros para llevarte con ellos, algo que no me extrañaría...

A propósito, vengo un poco tarde a recoger ese abrazo virtual, para mi y para Julio, con la intención de dejar que este tierno y entrañable post lo disfruten a sus anchas los protagonistas del mismo, pero ya no puedo esperar más.
Qué felices se os ve en el cuadro y qué envidia!!
Por cierto, que Arcendo se calaría hasta los huesos con el chaparrón de la mañana, pero por la tarde lució el sol madrileño espléndidamente a vuestro honor. No creáis que no me di cuenta, alguien debió hacer algo o ¿también fue obra de Arcendo que acaparó toda la lluvia para que no os callera una gota a los demás?.
Felicidades y besos a todos los afortunados.
BESIÑOS al autor
Espero que ya estés restablecido del todo y no me des más sustos de estos
Arcendo: tengo una duda: ¿El autor del cuadro es Renoir?

Momentos dijo...

Desde el fin de semana esperaba noticias vuestras, (de los que os reunísteis en Madrid) y me ha alegrado mucho poder leer tu entrada. La verdad, es que a la próxima me apunto, si Dios quiere.
por cierto quién fue desde Majadahonda?

ARCENDO dijo...

En espera de las esperadas crónicas de Ángel, os doy a todos las gracias por vuestros comentarios.
#Para Momentos: En cuanto, a tu pregunta, dejaré que la conteste si quiere, la persona que vive donde preguntas..., aunque yo, te adelantaré diciendo que yo mismo no vivo muy lejos de esa población madrileña. En cualquier caso, esperamos tu concurrencia y las de otros y otras, en los próximos encuentros.
UN FUERTE ABRAZO A TODOS.

MDR dijo...

He vuelto a leer esta entrada que me gustó mucho.
Van a hacer que muera de tristeza ante tanta dicha y alegría.
Felicidades por ustedes.

Militos dijo...

Aunque sé que a ti te da igual, voy a intentar rehacer el comentario que te dejé y se ha perdido. Lo hago sobre todo porque creo que lo que cuentas en el post merece la pena.
***************+++++++++++++++++
¡Ya era hora! estaba preocupada, llegué a pensar que te habían secuestrado los blogueros para llevarte con ellos, algo que, por otro lado, no me extrañaría.

A propósito he llegado un poco tarde para dejar que los protagonistas de este tierno y entrañable post, disfrutasen a sus anchas, pero ya no puedo esperar más.
Qué felices se os ve en el cuadro y qué envidia!!

Creo que eso era así, pero no me acuerdo del todo).

Por la mañana puede que Arcendo se calase hasta los huesos con el chaparrón que cayó, pero por la tarde lució espléndidamente el sol madrileño en vuestro honor. No creáis que no me di cuenta, alguien debió hacer algo o es que Arcendo acaparó toda la lluvia para que ninguno de los demás se mojase.
Felicidades y besos a todos y besiños al autor del post.
Arcendo: tengo una duda, ¿Es Renoir el autor del cuadro?

Bueno, querido, debe faltar algo, pero a pesar de mi buena cabeza(por ahora, gracias a Dios) no recuerdo nada más.
La verdad es que me pasé toda la tarde del sábado pensando en vosotros y lamentando no haber ido.
Parece mentira, ya ha pasado una semana. Me gustó mucho este post y todas las sensaciones de vuestro encuentro.
Ah, se me olvidaba que después de lo de haber tardado un poco decía "en recoger ese abrazo virtual para Julio y para mi"

Aquí te dejo una de mis tonterías, pero soy así, me gusta rematar la faena.
BESIÑOS Y FELIZ DÍA DE NUESTRO PATRÓN SAN ISIDRO.
¿TE VIENES A LA FERIA?

Boss dijo...

Gracias Arcen por acordarte de mí.
Dios habla a través de las circunstancias y no ha podido ser.

Bueno, "hay más días que ollas"...

Camino García dijo...

Querido Arcen:

Discúlpame por tardar tanto a comentarte, han sido unos días frenéticos en otras facetas, y la ocasión merecía palabras que son muy difíciles de encontrar.

Pero no hay problema... ¡¡¡las has encontrado tú!!!

Me encantó conocer a cada uno personalmente y a las familias de algunos de vosotros. Me encantó el mimo con que lo preparasteis, el cariño que dabais a raudales, los detalles..., tu sonrisa iluminada de niño grande feliz como si estuviera en un "Gran Día de Reyes Magos",sonrisa que parecía que no te dejaba hablar de tan grande que era y la inocencia, esa inocencia buena y grande...

Permíteme decirlo: tu familia, toooda ella, es de las más bonitas que he conocido en mi vida. Paseaba mi mirada por cada uno de vosotros en la cena, y veía lo que es hacer familia en Dios.

Dios te bendiga siempre, a ti a y a los tuyos, a cada uno, y tengo una oración de cuenta atrás, pendiente de unas notas, ya me informaréis, ¿eh?

Bueno, y que hay chaparrones que hablan de mucho amor, y esas cosas no se olvidan, los hijos las llevan ya en su mochila con lo imprescindible para poder ir por la vida (amor incondicional, valoración y escucha), así que seguro que valió la pena semejante catarro. Además de ganar en esto, ¿ganó el equipo de tu chico? ¡Qué carita tan graciosa y traviesa!

A todo lo demás, ya le has puesto palabras tú, así que sólo besicos y mil gracias de vuestra hermanica.

Anónimo dijo...

Vuelvo de nuevo para decirte que los sentimientos que has plasmado en mi blog son mutuos , yo también siento una dicha nueva desde que os he conocido y ese querer del que hablas creo que también habita en mi interior porque realmente os quiero, ya formais parte de mi vida y creo que los lazos que nos unen van mucho más allá del simple conocimiento.
El corazón queda envuelto en cierta nostalgia cuando recuerda lo vivido y realmente espera con ilusión que pueda volver a repetirse.
Estas en mi oración diaria.
Abrazos desde el corazón.

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