PARTE DE ALTA. +AGRADECIMIENTOS +ORACIONES

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Queridos todos, hoy por fín…, os traigo la noticia esperada. ¡Mi hija ya está en casa!
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Los primeros días fueron de mucha incertidumbre, pues había síntomas que apuntaban en más de una dirección. Poco a poco, después de varias pruebas y de muchos rezos, la cuestión se fue decantando por la opción que parecía más probable…, el cólico nefrítico.
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El sentimiento de resaca que se me viene, después de toda esta marea, es la perplejidad.
Perplejidad, porque me parece sorprendente que un gran hospital de Madrid, todavía “dude”, ¡dos días! en un diagnóstico que en principio parece sencillo, máxime cuando ese super hospital es además, universitario y se jacta de hacer descubrimientos y/o investigaciones punteras, en medicina.

Sin embargo, al fínal..., de pronto, siempre surge cierta duda única y "razonable" que guia todo con precisión y corrección y todo se encamina por la senda apropiada....
Pero, este ... será problema mío, que siempre ando descubriendo trascendencias en todo.
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En cuanto al famoso cólico, muchos de los que habéis podido padecer un cólico semejante, ya sabréis lo muy doloroso que es este proceso y que, una vez detectada la dolencia poco se puede hacer salvo beber mucha agua, y esperar que el dolor remita después de los distintos analgésicos puestos directamente en vena. Así pues, la situación, ya de por sí, difícil por dolorosa, se hace mucho peor de llevar, si el desarrollo se alarga en el tiempo.
Ni que decir tiene que es muy costoso para el que la sufre en sus propias carnes, pero os aseguro, y muchos lo sabréis que también lo es, para el espectador externo, ya sea familiar o acompañante…. La impotencia que siente uno al no poder hacer nada para aliviar ese intenso, agudísimo dolor ajeno…., creo, que en mi caso, hubiese sido imposible si no confiase plenamente en el poder de la oración y en la comunión de los santos.
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Desde ayer por la tarde, parece que empezábamos a ver la luz de final del túnel. El proceso se aceleró gracias a que mi hija se propuso beber, incluso sin ganas, tal y como le habían aconsejado aún teniendo el goteo…
Hoy había expulsado alguna arenilla y empezaron a quitarle cables y agujas, y a probar con medicación oral. Todo ha ido bien, asi que por la tarde decidieron darle el alta, con un tratamiento, para luego remitirla al especialista, una vez pasado el puente.

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Así que… ya estamos otra vez, toda la familia junta y aunque como dice Militos, hemos trasladado el Hospital a casa, esto ya es otra cosa y poco a poco… iremos alcanzando otra vez la “normalidad”… y con razón, escribo esta palabra entrecomillada.
Pues…, ¿Que queréis que os diga?, que creo, que estoy seguro, que estoy convencido que mucha “culpa” de que esta peripecia haya terminado bien… ha sido vuestra. De vuestras oraciones, de vuestra ayuda eficaz y silenciosa, de la hermandad invisible que nos tenemos.
Las cosas no pasan por que sí, El siempre es la guía de los médicos, y dá consuelo y fortaleza a los enfermos. Tan solo hace falta que se lo pidamos con fé y esperanza como todos habéis pedido por mi intención principal de estos días. Por eso, yo solo tengo palabras de agradecimiento que van a desembocar recíprocamente en oraciones para todos vosotros, como no puede ser menos.
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Una vez, -a toro pasado- os diré en confidencia, que aunque no sé si hago bien, yo pocas veces pido por la curación inmediata de la persona, ni si quiera por mi hija como ha sido el caso.
A veces, dando una vuelta al mundo, incluso al más cotidiano y viendo se sus muchas necesidades, mucho más importantes que las mías, casi no me sentiría con ningún derecho, si no fuera por aquel esperanzador: “Pedid y se os dará”
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Claro que pido para que, si es posible, se alivie o se acorte el dolor propio o el de mis seres más cercanos, pero …, solo si conviene, ¡Cuantas veces, durante estos días me he acordado de Getsemani!...: “Padre si es posible, pasa de mi este cáliz…”
Porque yo pido sobretodo porque se haga la voluntad, siempre amorosa de Nuestro Padre. Pido porque estos momentos aparentemente malos, tengan un provecho de bondad para todos los que los sufrimos.
Pido porque sepamos ver incluso en el dolor, la mano amorosa de DIOS.

Ya sé que pido lo más difícil, pero para Él no hay nada difícil, y a veces, si conviene, nos lo concede.
Dentro de unos cuantos posts, cuando me “recomponga” y se pase un poco esta vorágine recién vivida, os contaré una anécdota impresionante de estos días con la que sería de necios negar una constante intervención providencial sobre cada uno de nosotros.
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Insisto, para acabar, en daros las gracias:

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A Militos, Angelo, Bruce, Miguel Aranguren, Lahddec, Gran Visigoda, Sor Cecilia, María del Rayo, Gosspi, Agnus, Rafael, Eleonora, Una madre agradecida, El Padre Baregó, Martín de Alter ego, Balbi de estaesnuestracasa, Belén, María Jesús, Kara, Camino García…. Etc., etc., etc.

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A través de vosotros ha llegado –Su consuelo- a mi corazón, y la alegría a mi casa. Habéis hecho realidad ese “Pedid y se os dará”, que yo decía antes, y por eso, siguiendo vuestra lección de hermandad, no dejaré de pedir por todos y cada uno de vosotros, para que permanezcáis siempre fieles al Amor. Porque Yo…., os quiero mucho, pero EL nos quiere a todos más: ¡Es nuestro Padre!

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Post data 1.- (A petición de la afectada):
Me pide mi hija que os diga que sois todos fantásticos y me pide personalmente, que también os dé las gracias en su nombre por todos vuestros rezos y vuestros comentarios de apoyo tan llenos de calor.
También rezará por vosotros.
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Post data 2.- (Aclaratoria)
A pesar de la imagen de portada, aquí no llamamos a nadie… Mariposón/ona…, afortunadamente aún, no nos hemos cambiado de acera… jajajaja.
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Post data 3.- (Rogatoria)
Por favor, si sois tan amables, (mira que soy pedigüeño) no dejéis de rezar…, esta vez por mi.
Me han llamado para que el Jueves, vaya a recoger los resultados de una pruebas, y ando un poquillo nervioso con el tema. Con vuestra ayuda, seguro que iré alegre y confiado…, sabiendo que todo, todo, todo, es para bien.
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Buen fin de semana y buen Rosario bloguero….Gracias a todos, again.

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