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Que me gusta el cine es..., de dominio público. Que
soy un friki y un mitómano para ciertas pelis, también. Así que, como os podéis
suponer, soy de los que se devoran una y otra vez, las consabidas sagas
cinematográficas en dvd. Lo malo (o no) es que he pegado esa enfermedad,
también a mis hijos, que hasta se saben alguno de los diálogos de memorieta.
"Star wars", "Star Trek", Las cuatro de "Indiana Jones", las tres de "Regreso al futuro" y por supuesto "El Señor de los Anillos", son las que más se
ven en casa, aunque a algunos les parezcan insufribles.
Ni que decir tiene que en el cenit de todas son
las de Tolkien, dirigidas por Peter Jackson. Esa trilogía recupera plenamente el
sabor del cine épico en estado puro, pues en ella resplandecen todas las
virtudes que tradicionalmente se asocian al prototipo del héroe —la fortaleza de cuerpo y de espíritu, la lealtad, el
compañerismo, la capacidad de sacrificio, el honor, la dignidad....
etc., etc., etc.
Sin
embargo, creo que me gusta todo el "cine de superheroes", y
esto es porque en estas películas, además de entretenimiento (y mucho), también
quiero ver en ellas, la eterna lucha del mal y el bien; ganando el bien y siempre
exaltando valores positivos.
He dejado fuera adrede,-para hablar ahora de él-, a otro de
mis favoritos. La otra estrella de DC COMICS junto con Clark Kent; por supuesto
me refiero a Bruce Wayne, más conocido por BATMAN.
Me encantan las últimas ediciones del personaje, Cristopher Nolan lo borda. El
otro día pusieron en la tele una de ellas y volví a disfrutar como un niño.
Pienso que BATMAN es un héroe perfecto para estos tiempos, y
pienso también que, de algún modo, sobretodo la última película "The Dark Knight Rises"
podría resultar ciertamente perturbadora para muchos de nuestros
contemporáneos. El mensaje es... real,
lo que se ve, está ocurriendo actualmente en nuestra sociedad:
Los
valores en Occidente están subvertidos, y el aparato político no sirve para
nada; y los gobernantes son incapaces de distinguir entre el Bien y el Mal,
conceptos ya absolutamente instrumentalizados.
Hay ciertos momentos en las que la ficción
cinematográfica recuerda mucho al pasado histórico. Concretamente hay una
escena tremenda donde, después de una pantomima de juicio -el Juez es el “Espantapájaros-
cuelgan a un montón de gente del puente de Gotham, por el delito de ¡ser ricos!
(antes les habían expulsado de hoteles de lujo).
Esa
escena hizo venir a mis pensamientos, la revolución francesa y el linchamiento
de los nobles; o sin ir más lejos, los tribunales populares -de infausta
memoria- de la segunda república española.
En la tercera parte de Batman, el héroe deberá pagar
con su muerte, para preservar aquello que ama: Ciudad Gótica. No es suficiente haber
perdido a Rachel, debe darlo todo. En cierta forma, Wayne es un noble del
"ancien regime", dispuesto a defender su terruño, donde están
enterrados sus ancestros. Sería muy fácil viajar a lejos y dejarlo todo, pero
ello implicaría abandonar a las gentes sencillas a la suerte de los poderosos sin
escrúpulos, los políticos corruptos y la demencia delictiva; como así también
deshonrar su linaje.
Selina
Kyle trata de hacerle reaccionar: “¡No le
debes nada a esta gente!, ¡ya les has dado todo!", “No todo”
responde él.
Reitero, en épocas de este infame igualitarismo en
el que estamos viviendo, la película es extremadamente perturbadora: ¿cómo
alguien va a tener la osadía de elevarse sobre la Multitud? En el fondo, es la
alegoría platónica, aquel que ha salido de la Caverna, puede irse a una Isla de
arenas blancas con aguas turquesas, rodeado de mujeres y beber los más
refinados néctares, pero Platón lo increpa en su Dialogo: ¿Esa persona tiene lo
necesario para volver a la Caverna? Entre todos los encadenados, solo una
persona se libró de las cadenas ¿Por qué esa persona y no otra?
La historia de Batman está muy bien tejida y
resulta coherente y creíble. El despliegue de efectos especiales y recursos
tecnológicos es encomiable, pero lo más valioso del film, es el bien logrado
esfuerzo por explorar esas motivaciones morales, cargadas de humanidad y de un
sentido de la justicia muy cercano a la visión cristiana de la misma, entendida
como autentica superioridad moral y no como venganza.
Por
todo eso me gustan este tipo de pelis, con ellas, si se mantienen esos mismos
cimientos cinematográficos y morales, seguiré siendo un frikazo de tomo y lomo...
¡y a mucha honra!
* *
* * *
7 comentarios:
No soy muy fan de las pelis de Batman. En su día vi "El Caballero Oscuro" y me entretuvo, pero no le saqué tanto jugo. Ya me has liado para volver a verla... (gracias).
Querido Friki: haces muy bien en afirmar tus sanas aficciones.
Ya sabrás que fue un cura español, nieto del fundador de las bodegas Osborne, quien más influyó en Tolkien, en su formación espiritual e intelectual.
A mí lo que más me frikea es el Adagio que hoy acompaña tu estupendo post, no lo puedo remediar.
Aplaudo tus gustos, aunque esas pelis me han pillado tarde, con tus explicaciones en otro tiempo me hubieran encantado.
BESIÑOS Y ADAGIOS, SIEMPRE ADAGIOS
Me sigue gustando leerte.
San Peregrino. Ruega por Arcen.
DTB!!
Bueno, pues ya me voy, por hoy, tengo la mañana complicada.
Te dejo en el regazo de nuestra Madre, junto a Jesusito, para que pases una buena noche.
Hasta mañana si Dios quiere.
BESIÑOS DE GUARDIA, ARCENDO
Yo te entiendo Arcen, yo soy un friki de la música de Bruce.
DIFRÚTALO !!!
En esto de Batman, compartimos frikismo amigo arcen, es un autentico sueño, hacer justicia por uno mismo y todo lo que ello conlleva, de eso se trata.Harian falta tantísimos Bruces Waynes en este mundo, que no valdria de nada uno solo.
Acabo de llegar del hospital. Esto que dices es así, es claro y diáfano.
Ayer mi hermano se quedó a dormir con él y nos llamó a las siete de la mañana para que subiéramos, porque parecía el final. Llegamos y estaba muy mal. El médico nos dijo que estaba corriendo como un "tour de Francia", luchando por vivir. No miraba y nos agarraba la mano.
Hasta las diez de la noche estuvo con apneas ininterrumpidas y nos dijeron que había entrado en coma. Que el final estaba cerca, que no podía resistir más, que era demasiado tiempo luchando...pero resistió...inexplicable...
Nos quedamos a dormir con él mi hermana y yo, y se quedó tranquilo, plácidamente dormido, inexplicable. A las dos de la mañana me desperté sobresaltada, me había quedado adormilada. Mi padre tosió en ese momento, abrió los ojos y movió las manos, parece que me tenía que despertar para darme cuenta. Después se quedó otra vez dormido. Creo que se entera de todo...está muy tranquilo, apacible. El médico no tiene explicación, llegan hasta donde llegan, no más.
He venido a casa a descansar, pero estamos tranquilos de verle así, parece que nos está diciendo que él está tranquilo...
Yo me creo todo lo que dices, porque yo también siempre lo he creído, y si esto es friki, pues me da igual...así de claro, como esta entrada es de clara...el mito de la caverna ¡me encanta!
Espero que te encuentres muy bien, como eres friki, seguro que te encuentras de maravilla...
Muchas gracias, tranquilo...Dios está siempre...
Si no te importa no lo publiques, era para contarte una ¿frikada?...
benditas frikadas...y venir a saludarte (pero si quieres publicarlo lo publicas, lo que quieras, con los ojos de la FE, la mirada cambia "por narices")
Un abrazo fuerte.
La película del Hobbit será para otra vez, estaba prevista para este jueves pasado, pero...Dios manda...TRANQUILO...este blog, una vez más te lo digo, es magnífico...he rezado el rosario que ni te cuento, ya no sé rezar otra cosa, me sale naturalmente...es la vida misma...
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