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Iniciamos una semana nueva. En esta, concretamente el martes si el
análisis de sangre previo no recomienda lo contrario, recibiré mi primera
sesión de quimio tras la operación. Parece que los plazos se van cumpliendo
según lo previsto, puesto que, aunque todavía ando renqueante, me siento un
poco más fuerte. Las flemas van siendo remitiendo lentamente y casi puedo
(podemos) dormir toda la noche del tirón. Veremos como reacciona mi cuerpo,
después de la quimio, porque aunque será más suave que las anteriores, tengo
mis temores. DIOS sobre todo.
Sin embargo, también empezamos una semana muy sonada
-por la celebración que tiene lugar-, de la cual, este año sobretodo, quiero
hacer mención especial. Por supuesto me refiero a una de las onomásticas más
festejadas en medio mundo, SAN VALENTÍN.
La verdadera historia de este
santo de la Iglesia Católica,
data de la Roma del siglo III, época en la que el cristianismo era perseguido. Fue
este, un periodo en el que estaba prohibido el matrimonio de los soldados, la
teoría era que los hombres solteros rendían más en el campo de batalla que los casados
porque no estaban emocionalmente ligados a sus familias.
Es en estas circunstancias surge la figura
de Valentín, un sacerdote cristiano que ante la injusticia decide casar parejas
bajo el ritual cristiano a escondidas del Imperio. Como suele ocurrir ante la
insurrección, el bueno de Valentín fue ejecutado precisamente un 14 de febrero.
De todos modos, lo sorprendente es el filón comercial que
ha surgido de la vida de este curita No hay marca o firma comercial que no
pretenda hacer el agosto en pleno invierno. El santo y el amor... son la excusa
perfecta, para la obtención de fines puramente lucrativos, absolutamente
materiales. Y me temo que..., una vez más, (al menos en ciertos sectores),
triunfa el error...., y la mediocridad
Por eso, hay muchos que reniegan de esta
fiesta, pero ¡no es mi caso!.., yo TENGO MOTIVOS
para celebrarlo. A mí, aún así, y comprendiendo que el amor debe ser celebrado
cada día del año, me gusta que exista un día especial para agasajar de forma
especial (que no tiene porqué ser con gasto monetario alguno) a alguien que
para tí, es especial.
En cualquier caso lo que pienso que habrá que hacer, será volver a la cordura,
recuperar el sentido -cristiano y humano- que nos han arrebatado. Que no es
otro que la celebración del -amor para siempre-, cimentado firmemente en el
AMOR que DIOS tiene por su criatura (hombre y mujer), como seguramente enseñaba
y fomentaba aquel divino sacerdote romano llamado VALENTÍN.
Dicho esto, yo no puedo dejar
la fecha, sin hablar de lo
que me toca, sin dar mi testimonio, sin compartir mi vivencia y mi alegría.
Esta semana de San Valentín me parece el pretexto ideal para ponderar la gracia
inigualable que es el matrimonio cristiano. No me cabe duda que el amor matrimonial
es un don divino.
Ciertas cosas en la
consecución de mi matrimonio,
todavía hoy me parecen imposibles. Mi mujer y yo, antes de ser novios, antes de
conocernos, vivíamos en dos puntos opuestos y distantes de la ciudad de Madrid.
Yo en Moncloa y ella en Vallecas. Nunca había ido ese barrio, y nunca había
pensado ir. Sin embargo, el hombre propone y DIOS dispone. A pesar de los
tumbos y reniegos que he dado por esta vida, el plan de DIOS se ha ido cumpliendo
conmigo, milimétricamente.
En un momento de mi vida, DIOS se valió de un gran error mío, para
regalarme el conocimiento de la que hoy es mi mujer. En un primer momento, no
lo valoré, ahora me emociona reconocerlo.
Tras ese primer contacto, día a día, DIOS
hizo que nuestro amor fuera creciendo, y EL siempre ha estado presente entre
nosotros.
El matrimonio no ha estado exento de
dificultades, enfermedades, traspiés, resbalones, pero el AMOR de DIOS nos ha
mantenido unidos y en constante evolución.
En esto del amor conyugal no hay trucos, sin
embargo creo que la fórmula perfecta la da SAN PABLO, plasmada sobretodo en su
famosa carta a los Coríntios:
"El amor es paciente y servicial...",
"...todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo
espera, todo lo soporta." (ver ENLACE)
Pues bien, a través de esa
relación en la que mi
esposa ha volcado en mi, el respeto, la paciencia y la comprensión, de la que
habla esa preciosa epístola paulina, yo he descubierto -cierta y palpablemente-
el AMOR de DIOS.
Muchas veces lo he dicho aquí, últimamente y
más en todo este proceso de mi enfermedad, las palabras de mi mujer, han sido
las palabras de consuelo y aliento de DIOS. He sentido que sus manos siempre
llenas de atenciones han sido las caricias de DIOS, conmigo. Sus lágrimas, el
sufrimiento que el PADRE tiene por su criatura.
El cariño inmenso por mi mujer que ha ido
creciendo con los años y con la convivencia, es ahora incluso superior, porque
está intima e indefectiblemente ligado al AMOR DE DIOS.
¿Como no voy a festejar este
14 de febrero? ¡TENGO MOTIVOS!
Este año, tal día, no será un día de gastos
especiales, ni de comidas o cenas fuera de casa, no será tampoco, momentos de
excesivas efusiones, pero mi celebración será tan apoteósica como sincera y lo
que si os puedo asegurar es que se alargará todos los días del año y durante el
resto de mi vida, dure lo que dure. El AMOR ES EL
MOTIVO.
* * * * *
8 comentarios:
"El amor es algo maravilloso" y en vuestro caso sublime.
Te felicito por festejar de esta manera a este S. Valentín que muy pocos conocen.
Qué bonito post, tu mujer se lo merece y estoy segura que cuando Dios os está haciendo pasar esta dura prueba, una más y de qué medida, mano a mano, corazón a corazón, es porque sabe de qué madera estáis hechos los dos, sabe que podéis con ella y la recompensa va a ser inigualable.
De todo corazón os deseo un día muy feliz y amoroso.
¿Ves como los plazos se van cumpliendo? No se te ocurra dudar, querido Arcendo. El tiempo de Dios no es el nuestro, pero sí el justo y misericordioso por encima de todo.
¡Qué maravilla de post! Así cualquera va confiado a la quimio.
Un beso enorme para Guadalupe y Besiños de siempre y de guardia para tí, Capitán
Cuánto me alegro, querido Arcendo. Que tengas una buena semana.
Abrazos.
¡Qué bonito!, es una hermosa declaración de amor. Os felicito, el amor todo lo puede y crece con las dificultades.
Decía mi abuela: "Matrimonio y mortaja, del cielo baja", y es así, viene de Dios, es su plan.
Quiero pedirte disculpas por decir ayer ¡viva la madre...!...lo siento, es la primera vez que lo digo en mi vida, es verdad, no porque sea malo, pero no me gusta decirlo, y por escrito menos. Con la Zarzuela me emocioné, lo siento.
Gracias por compartir estas vivencias tan bonitas, también las comparto y creo en todo lo que dices: ¡hay que celebrar san Valentín!, pero todos los días, con cualquier detalle.
La música es ¡córcholis!, preciosa.
No tengas miedo con la quimio, que poco a poco y pasito a pasito, todo pasará. Hoy nos hemos enterado de que un querido amigo tiene cáncer, pero no saben si se puede operar, y ése es el peligro, no operarse...veremos...
Un abrazo muy grande para los dos y muchas felicidades.
¡Feliz semana! Aquí tenemos puente, mi hija no, vivimos en 17 países distintos...en fin...
Se me olvidaba, como siempre: la imagen es preciosa.
No te preocupes,Rosa, también se lo dijeron a Jesucristo y ha quedado escrito por los siglos de los siglos.
Besos
Arcendo: cuando vine antes era para seguir escuchando y viendo tus maravillas musicales, pero me encontré con este post y dejé los videos porque tu entradame supo a música celestial.
Espero que sigáis durmiendo bien, con los ángeles que os guardan a los cuatro.
BESIÑOS MUY GRIPOSOS
Por cierto, por estas fechas no era el aniversario de tu blog? ¿Ha pasado ya?
Da lo mismo, sé que no estás para tartas, pero lo importante es que La Hoja sigue aquí, disfrutamos y aprendemos de ella y con ella. Nos ayuda a caminar, tú nos ayudas a caminar.
BESIÑOS ARCENDO
Todo amor viene de Dios.
¡Felicidades Arcen!
Que sigas siendo feliz.
DTB!!
Me encanta que puedas celebrar con tanta alegría esta fecha tan significativa.
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