IMAGENES, FÉ y ... FORMACIÓN

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Siempre me ha llamado la atención, que muchos nos acusen a los católicos de idolatría.

Me duele especialmente, que sean muchos, que dicen ser cristianos, los que parezcan dar la razón a esa mentira.

Últimamente, noto un incremento de cierto "fetichismo cristiano"..., no sé si será una estrategia prediseñada, -vaya a usted a saber porque retorcida mente-, pero el caso es que empiezo a ver, cada vez a más gente, con rosarios de pulsera o colgados a modo de simples amuletos, con cruces colgadas de las orejas de los tipos y tipas más excéntricos y hasta personas que se dejan tatuar imágenes religiosas en partes del cuerpo que ni me atrevería a nombrar...  ¿Es esto idolatría o verdadera religión? Me atrevería a afirmar lo primero, creo que el que practica estas modas, no tiene muy claros los fundamentos más básicos de la fe.

Otra cuestión, que me duele son... las acusaciones provenientes de los "hermanos separados". Ellos, presumen de ser grandes conocedores de los textos bíblicos y en cierto modo es así, aunque luego manipulen cada párrafo a su conveniencia. Se agarran a sus interpretaciones particulares de la Escritura, para acabar difundiendo la falsedad de que los católicos "adoramos imágenes", cuando en ningún caso es cierto.

De vez en cuando, aunque sea para reforzar nuestra memoria y reafirmarnos en la verdad, conviene recordar y repetirse a lo largo del día, que los católicos SOLO adoramos a Dios, y esto, hay que tenerlo claro, una y otra vez.

Sin embargo en cualquier caso, lo primordial es LA FORMACIÓN.

Sorprende muchas veces en nuestros templos, la devoción que tenemos a  una determinada imagen ante la cual no paramos de santiguarnos  una y otra vez, y estando el Sagrario a lado, con Jesús Sacramentado en su interior, no le dediquemos ni una pobre genuflexión, ni tan siquiera un pensamiento, ni... una mirada.

Creo que somos nosotros, en primer lugar, los que hemos de tener las cosas claras, para empezar a combatir las mentiras que vengan desde fuera.

Las imágenes son meras representaciones artísticas de mejor o peor gusto y factura; pero ni son dioses, ni tienen entidad, ni identidad alguna. Los católicos NO adoramos imágenes. Son solo signos, a veces necesarios y por eso permitidos por la Iglesia, que nos ayudan al recuerdo y nos animan a la oración.

Tal como una fotografía nos representa a una persona querida, así "El Descendimiento" de Van Der Weyden, pongo por excelso caso, nos facilita a evocar visiblemente el sentimiento de aquella terrible escena de la vida y muerte de Nuestro Señor...

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Es cierto que los católicos NO necesitamos de -imágenes- para rezar, pero es indudable que estas son una ayuda importante, para elevar los sentidos, para visualizar lo invisible, para explicar lo que no se podría explicar con palabras. Por eso, el hombre siempre ha usado el arte, la pintura, la escultura etc..., para darse a entender, o incluso para explicar algo. Y eso... ¡no es idolatria!

Como bien dice Santo Tomás de Aquino:

"El culto de la religión no se dirige a las imágenes en sí mismas como realidades, sino que las mira bajo su aspecto propio de imágenes que nos conducen a Dios encarnado. Ahora bien, el movimiento que se dirige a la imagen en cuanto tal, no se detiene en ella, sino que tiende a la realidad de la que es imagen". (Summa theologiae)

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Me gustaría también, expresar mi convencimiento de que la devoción que muchos creyentes sienten por algunas imágenes llega y es así, porque esos artistas estaban de algún modo, tocados de DIOS, inspirados por Él.

Me quiero acordar ahora, de una película excepcional llamada Andrei Rubliov.

Rubliov fue un personaje histórico, que vivió entre los siglos XIV y XV, fue religioso y pintor... De hecho, está considerado como el pintor de íconos más importante de la Rusia.

Esta película, me lleva a ADMIRAR lo mucho que rezaban e incluso ayunaban aquellos iconógrafos de la época, antes de plasmar en las tablas, alguna de aquellas preciosas imágenes. Indudablemente la inspiración, no era de este mundo. No me cabe duda.

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Tal como podemos contemplar en esta entrañable imagen, cuya autoría desconozco.

 

En este punto conviene recordar que también, hay mucha confusión en lo que respecta al culto a la Virgen, a los ángeles o a los Santos. Algunos también nos llaman idólatras por eso. Sin embargo, se hace imperativo aclarar de una vez por todas, que la Iglesia Católica venera a los santos pero NO los adora, y a la Virgen, por ser la Madre de DIOS, se la tributa una especial veneración.

Desde la antigüedad la Virgen, los ángeles y los santos han sido invocados como poderosos intercesores ante Dios: el culto que la Iglesia les tributa está dirigido a Dios mismo. Por eso se nos proponen como modelos seguros de vida cristiana. Entre ellos María desempeña un puesto privilegiado, como ya hemos dicho, por ser la Madre de DIOS, nuestra Madre y nuestra Co-redentora.

Concluyendo, según explica el Catecismo de la Iglesia Católica en el final de su punto 476: "... En el séptimo Concilio ecuménico, la Iglesia reconoció que es legítima su representación en imágenes sagradas"; de tal manera que podemos estar absolutamente tranquilos.

Es decir... no sólo es bueno llevar una cruz al pecho con fe y fervor verdaderos, besar los evangelios, tener imágenes de Cristo, de la Virgen y de los santos, sino que son prácticas muy recomendables, por ser una tradición antigua de la Iglesia, y por ser además, un estímulo incomparable para nuestra oración, para nuestra relación más íntima con Nuestro DIOS, que es al único que amamos sobre todas las cosas y por lo tanto, adoramos.

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Ahora bien..., lo primero  para tener todas estas cosas claras y también para aumentar nuestra fé, tiene que ser: LA FORMACIÓN

Una formación contínua e integral, basada en la oración, en la lectura, en el estudio.

Una formación enraizada en unos buenos conocimientos de la Biblia y de la fe.

Una formación que también podemos extraer de la red, a través del conocimiento y del buen criterio de buenos hermanos nuestros que nos ofrecen sus vivencias y luchas, a través de sus blogs.

Por eso.. hoy, antes de terminar, os ofrezco como pequeño botón de muestra, CINCO buenas fuentes de la mejor FORMACIÓN.

Son CINCO manantiales limpios, de los que yo bebo siempre que puedo.

Cada una de ellos, es distinto y tiene sus peculiaridades, pero de todos brota la misma AGUA, fresca, cristalina,... verdadera, que hoy os invito a serviros desde mi blog.

- DE DENTRO (pincha AQUÍ)

- SIETE EN FAMILIA (pincha AQUÍ)

- AHORA QUEDAMOS EN EL BLOG (pincha AQUÍ)

- CAMINANDO HACIA LA VIDA (pincha AQUÍ)

- BLOG DE LA PARROQUÍA DE SAN ANTONIO DE LA FLORIDA (pincha AQUÍ)

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Y suma y sigue..., porque afortunadamente hay muchos más BLOGS HERMANOS, que por falta de espacio, que no de cariño, no pongo hoy en este post, pero que si están en el lateral derecho de mi Hoja.

En cualquier caso, INSISTO, el objetivo primordial siempre ha de ser: LA FORMACIÓN. Una buena y responsable formación diaria, con todos los medios que tengamos a nuestro alcance.

¡FORMACIÓN... esa es la condición "sine qua non"!

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