¿CUESTIÓN DE FÉ?

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"Mirad los lirios del campo, con tan vistosos colores. Ni el rey Salomón, con todo su fasto, podría vestirse de igual manera”.

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Semana esta, ciertamente atípica. Sin querer ser este un argumento más para los que quieren borrar "los puentes", habrá que rendirse a la evidencia de lo poco productivo de la septena que nos ocupa; puesto que laboralmente, ha dado comienzo en la mitad de la misma. Así pues... como poco la semanita la podríamos etiquetar de diferente.

No extraña, pero si... algo inusual, al igual que los acontecimientos que la rodean, tanto por delante, como por detrás.

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En el futuro más inmediato, dentro ya, solo de unas horas, nos espera el inicio de una trepidante campaña electoral, de la que nos ocuparemos debidamente en su momento; sin embargo, no podemos pasar por alto que acabamos de dejar atrás un mes de Octubre, que deja unos datos muy significativos. Se trata de una información crucial que puede marcar la política social de los próximos años, gobierne el partido que gobierne.

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No estoy hablando, por muy alarmante y preocupante que sea, de los crecientes datos del paro, ni tampoco me circunscribo solo a nuestro país. Es algo global, las medidas que se tomen y después las consecuencias derivadas de las mismas, nos van a afectar a todos, a cada hombre y mujer de este planeta. Por eso, aunque nos hayan vendido la noticia como anécdota... esta, tiene en realidad mucha importancia, porque es un aviso... de la deriva ideológica y cultural de occidente para los próximos años.

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Dicen, -habrá que creérselo-, que justo en la medianoche del 30 de Octubre, venía al mundo, el habitante número 7.000.000. La llegada, al parecer generó una pequeña polémica, ya que recién nacidos de Rusia, la India y Filipinas, se disputaban ese honorable título; al margen de eso, lo que si ha hecho la ONU, a través de su secretario general, ha sido aprovechar el hecho, para lanzar el mensaje-clave: "Somos muchos.... ¡¡alarma!!"

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Esa formidable maquinaría de implantación de usos sociales que es la ONU -institución cada vez menos creíble- y sus organismos, en este caso su "Agencia del Fondo de Población" (UNFPA), utilizan astutamente ese nacimiento como la excusa perfecta para la mega-difusión de este aparente "mensaje de reflexión". Y todo eso estaría muy bien, si todo fuese cierto y esa media verdad, no hiciera el caldo gordo a muchos intereses creados.

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Cualquiera que tenga memoria o en su defecto acuda a los libros o a las hemerotecas, podrá comprobar que estos mensajes de alarma, son cíclicos, y que... por tanto no se deben tomar demasiado en serio.

Hace unos pocos años la emergencia venía por el calentamiento global, y fue ese desasosiego el que sirvió de filón lucrativo a algún aprovechado como el tan supervalorado como caradura, Al Gore.

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Un poco más atrás en el tiempo..., en 1798, Thomas Malthus publicaba el "Ensayo sobre el principio de la población", obra que es en realidad, el origen de todas estas teorías, hoy tan en boga.

Malthus afirmaba a través de su obra, que mientras la producción de alimentos crecía en proporción aritmética la población lo hacia en proporción geométrica.

Pero lo que el pensaba ayer, hoy no tiene base alguna.

Por un lado, consideró que el crecimiento de la población se mantendría inalterado, lo que parecía bastante coherente en su tiempo, pero no ahora.

Por otro lado, tampoco acertó, porque la industrialización elevó la producción de alimentos en los países ricos y, de paso, redujo en ellos la tasa de fertilidad.

Por tanto..., Malthus, además de estar desfasado, está rebatido, porque dio por ciertas, premisas hoy comprobadamente falsas.

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Tomemos como ejemplo de realidad tangible y comprobable los últimos datos sobre la población en España, ofrecidos, precisamente, el mes pasado por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Precisamente ese organismo nos arroja unos datos preocupantes, pero en un sentido diametralmente contrario del que nos dice la ONU.

A fecha de Octubre de 2011, una de las principales conclusiones que se pueden extraer de la proyección de la población es de ¡CRISIS DEMOGRÁFICA!, (Ver ENLACE); es decir, España pierde población, debido tanto al frenazo de la inmigración como al creciente descenso de la natalidad en nuestro país.

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¿En que quedamos entonces?, ¿Está esa alarma mundial justificada ante la superpoblación?, ¿Buscan acaso una solución o una "selección"?

En realidad el responder a esa última cuestión da miedo por el tufillo totalitario que desprende. Ahora bien, lo cierto, es que la gran mayoría de los organismos de la ONU, como la OMS o la UNICEF, están llevando a cabo políticas muy definidas con respecto a los controles de natalidad, defienden el aborto en ciertos países, fomentan tanto el uso del preservativo, como cualquier otro método de esterilización y anticoncepción, sobretodo en los países menos desarrollados; y lo hacen con mentiras cada vez más notables.

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Repasemos, enumerando alguno de esos embustes malthusianos, que medio mundo da como hechos probados:

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1.- Los países del tercer mundo necesitan reducir su población, al menos temporalmente para salir del subdesarrollo.

2.- Los países pobres, lo son porque tienen demasiada población.

3.- ¡Se acaban los recursos!

4.- Aunque hayan recursos, nos quedamos sin espacio físico porque somos muchos.

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El mensaje siempre es el mismo... ¡Selección humana!, así de crudo, así de verdadero.

Aquel "Mundo feliz" del Huxley está llamando reiteradamente a nuestra puerta.

¿Y que hay de verdad en todo esto?

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En principio lo que hay que decir es...

- Que cabemos muchos más en esta tierra.

- Que no hay vinculación entre pobreza y población.

- Que el problema del hambre y de otras carencias, no reside en una superpoblación inexistente.

- Que las regiones más pobladas no son las más pobres.

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Una universidad americana elaboró un estudio tan curioso como significativo. El trabajo demuestra que si se juntara toda la población del mundo en una ciudad como Nueva York, es decir, con una razonable zona industrial, áreas verdes, oficinas y residencias, la ciudad con toda la población del mundo entraría completa en el estado norteamericano de Texas y se alimentaría con un terreno cultivado equivalente a la India. ¡El resto del planeta estaría totalmente vacío!

Por otra parte, la densidad poblacional del mundo se encuentra en zonas como Hong Kong, Taipei, Tokio y Manhattan, todas ellas con niveles de vida altamente superiores al standard. Lo curioso es que estas ciudades no decrecen justamente porque la gente no quiere irse, sino más bien mudarse allí. La razón: la concentración de población concentra también servicios y, por tanto, incrementa el bienestar. El caso caótico de ciudades como Calcuta se debe más a un problema de administración y organización que a la mucha población.

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Por tanto..., hay que concluir, con la razón y con los datos en la mano, que esa alarma, voceada, amplificada, difundida, jaleada, por la ONU y los medios afines, que son muchos, es desproporcionada y falsa, y que solo obedece a unos intereses oscuros que nada tienen que ver con la salud, la protección y mucho menos... con la dignidad del hombre.

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Como dice Ramón Pi, en un buen artículo firmado hoy en la Gaceta Digital (Ver enlace), "se trata simplemente de una campaña propagandística y emocional de las que acostumbra a lanzar la ONU cuando quiere transmitir un mensaje alarmante a la gente con tantos buenos sentimientos como poco espíritu crítico. Los ingredientes de la campaña están bien calculados: el recién nacido es niña; su apellido es español, y su nacionalidad, filipina, país asiático de cerca de 96 millones de habitantes, con aplastante mayoría católica (algo más del 80 por ciento). Estos datos no son baladíes, porque la Iglesia católica es la más importante institución del mundo contraria a las políticas de control de la población que el UNFPA llama “programas de salud reproductiva”, y porque la América hispanohablante se resiste a las imposiciones y los chantajes del UNFPA para implantar leyes anticonceptivas y abortistas y esterilizaciones masivas."

Todo está milimétricamente estudiado para engañar.

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Concluyo. Dicen que ya somos 7 millones..., y dado que es imposible contar a todos los que somos uno a uno, se nos pide un acto de fe para creerlo, sin embargo este no es incondicional, ni les faculta para hacernos creer todas sus mentiras.

¿Fe verdadera? ¡Solo en la Providencia divina!, esa que cuida amorosamente y sin descanso de los pájaros del cielo y de los lirios del campo. Solo eso, sin más preocupaciones impuestas.

Porque como decía San Rafael Arnáiz, solo una cosa importa, "No desear, no buscar, no pedir..., solamente amar a Dios y entregarse en sus manos como un niño pequeño".

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Os ofrezco finalmente dos buenos recursos.

El primero es ciertamente excepcional. Se trata de un enlace a una página donde están todos los datos, -continuamente actualizados- sobre la población mundial, en tiempo real. Os invito a pinchar en el siguiente link y que verifiquéis (¡en el apartado "salud"!) los escalofriantes datos sobre ABORTOS solo durante este año...

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Este es el ENLACE 

y esta la dirección: http://www.worldometers.info/es/

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El segundo, costumbre en esta casa, es un vídeo donde se comprueba que ni el muy "progre" John Lennon se creía LA GRAN MENTIRA. Por ahora, nada más... saludos a todos.
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